Fertilidad
A partir de los 35 años, las posibilidades de tener hijos disminuyen notablemente. Esto provoca que los problemas de fertilidad femenina y masculina se hayan convertido en una preocupación para muchas parejas. Llevar una vida activa y seguir una alimentación equilibrada, junto con la ayuda de algunos remedios naturales para la fertilidad, puede aumentar las posibilidades de lograr el ansiado embarazo.
A partir de los 35 años, las posibilidades de tener hijos disminuyen notablemente. Esto provoca que los problemas de fertilidad femenina y masculina se hayan convertido en una preocupación para muchas parejas. Llevar una vida activa y seguir una alimentación equilibrada, junto con la ayuda de algunos remedios naturales para la fertilidad, puede aumentar las posibilidades de lograr el ansiado embarazo.
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A partir de los 35 años, las posibilidades de tener hijos disminuyen notablemente. Esto provoca que los problemas de fertilidad femenina y masculina se hayan convertido en una preocupación para muchas parejas. Llevar una vida activa y seguir una alimentación equilibrada, junto con la ayuda de algunos remedios naturales para la fertilidad, puede aumentar las posibilidades de lograr el ansiado embarazo.
¿Por qué disminuye la fertilidad femenina y masculina?
Cada vez hay más parejas que sufren problemas a la hora de tener hijos. Factores como el retraso en la edad de la maternidad, el estrés, el sedentarismo o una alimentación inadecuada provocan una disminución de la fertilidad femenina y masculina, en especial a partir de los 35 años. Los tratamientos de fertilidad son el último recurso, pero resultan costosos y no siempre funcionan. Por suerte, antes de tener que recurrir a ellos existen algunos remedios naturales para mejorar la fertilidad.
Remedios naturales para aumentar la fertilidad
Los suplementos de zinc, magnesio, selenio, cobre y calcio pueden tener un efecto beneficioso a la hora de aumentar la fertilidad femenina y masculina, ya que unos niveles adecuados de estos minerales favorecen la producción de óvulos y espermatozoides. Por su parte, los antioxidantes como la astaxantina protegen a estas células del deterioro.
Así mismo, los extractos de plantas como la maca, el tribulus o la rodiola también son beneficiosos para la fertilidad y a la hora de aumentar la libido. Finalmente, es recomendable tomar suplementos de vitamina B (como el ácido fólico), vitamina C y vitamina E. Son una ayuda tanto para la fertilidad como para el correcto desarrollo del embarazo y, de hecho, a menudo se prescriben en los primeros meses de la gestación.
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